Bona vesprada, i de nou benvingudes i benvinguts a aquest important acte acadèmic que celebrem amb motiu de la finalització formal del curs dos mil vint-i-dos - dos mil vint-i-tres. Aquesta cerimònia de clausura adquireix una especial rellevància amb la investidura de nous doctors, el lliurament dels premis a tesis doctorals, i amb el nomenament com a doctora honoris causa per la nostra universitat d'una de les personalitats de major rellevància actual en l'àmbit de l'economia, la professora Mariana Mazzucato.
Ha sigut un curs de plena recuperació de la normalitat, i afirme que hem anat més enllà del que era la vida als campus abans de la pandèmia, pel que fa a la vitalitat i activitat que hem gaudit. Era important fer-ho perquè eixíem de temps difícils, que han deixat empremta en tots nosaltres. Hem recuperat la vida acadèmica, i la vida social als nostres campus, tant per a l'estudiantat, com per al personal d'administració i serveis, i el personal docent i investigador.
Per a mi, el curs que tanquem ha transcorregut a velocitat vertiginosa, igual que ho han fet aquests dos anys que porte, gràcies a la confiança de la comunitat universitària, com a Rector. Ha sigut un curs intens, ple de novetats, amb millores en el rumb de la Universitat, d'innovació, de treball en la millora de l'eficiència dels nostres procediments, i d'importants assoliments conjunts.
Sin ánimo de ser exhaustivo, quiero subrayar algunos de estos hechos:
. Se ha implementado plenamente la reforma laboral y la Ley de la Ciencia, y hemos iniciado los primeros pasos en la implementación de la nueva Ley Orgánica del Sistema Universitario.
. Hemos dado pasos importantes en la producción y gestión en el ámbito de la I+D+i+t . Ha habido modificaciones sustanciales de nuestras normas y procedimientos de funcionamiento, destacando el reglamento de gestión de la I+D+i que ha venido a resolver algunos problemas importantes que llevaban estancados desde el 2017. Y hemos alcanzado récords en captación de recursos para I+D+i y transferencia, con continuo e importante crecimiento de nuestra producción científica.
. Nuestro estudiantado ya se acoge a una nueva normativa de progreso y permanencia que, junto con el Plan Integral de Acompañamiento al Estudiante, y la promoción y el reconocimiento de actividades extracurriculares hasta los 18 ECTS, además de otras importantes acciones en el ámbito formativo, nos ha llevado a ser la primera universidad española en docencia dentro del U-ranking (última edición del ranking de la Fundación BBVA y el IVIE).
. Este curso hemos conseguido además revertir con claridad una tendencia de perdida de estudiantes matriculados - sin duda muy perjudicial para nuestro entorno socioeconómico que demanda más titulados de la UPV - en una gran parte de nuestra oferta académica; oferta en la que, por cierto, CYD (Fundación Conocimiento y Desarrollo) nos dice que tenemos prácticamente pleno empleo. Y esto en un entorno adverso de bajas vocaciones tecnológicas y científicas, y de disminución de la población en las cohortes típicas de acceso al grado y máster.
. Y somos un motor de desarrollo de nuestro entorno: Cuidamos la relación con la empresa y la empleabilidad. En dos años, el número de cátedras y aulas de empresa ha escalado más de un 65%, desde 66 a más de 110. Y durante dos años hemos roto el techo de participación de empresas en nuestro Foro de Empleo de cada primavera. Además, ya gestionamos casi 11.000 prácticas de empresa al año. (La inmensa mayoría remuneradas).
. No es casual que la Universitat Politècnica de València sea un elemento decisivo para la atracción de empresas de vanguardia tecnológica al área metropolitana de València, como ha sido públicamente reconocido. Algo está haciendo bien nuestra comunidad universitaria.
. Somos cada vez más sostenibles con un compromiso manifiesto con los ODS. Apostamos por la sostenibilidad social, económica y medioambiental. Así lo refleja nuestro nuevo Plan Estratégico 2027 (SIRVE), aprobado también este curso, y algunos datos externos internacionales. La notable subida de puestos en el ranking Green Metrics (ya estamos entre las 150 más comprometidas con el medio ambiente), o la reciente edición del ranking THE University Impact según el cual la Universitat Politècnica de València (UPV) es una de las 200 universidades con mayor impacto social y económico del mundo. Y más concretamente, se reconoce a la UPV como la séptima mejor universidad del mundo en el ODS 8 (Trabajo decente y crecimiento económico), la 20ª en el ODS 13 (Acción por el clima) y la 45ª en el ODS 4 (Educación de calidad).
Y todo ello efectuando un considerable esfuerzo para la necesaria modernización de la maquinaria de la administración y reducción de la burocracia con resultados que se van percibiendo. Esto es resultado de un esfuerzo colectivo de la comunidad universitaria, y debemos estar contentos, pero no satisfechas o satisfechos. Hay mucho por hacer, y los escenarios que vislumbramos obligan a un permanente esfuerzo de renovación y de innovación. Esa ha sido nuestra cultura tradicionalmente, y eso nos debe dar la confianza de que estamos preparados para seguir por el buen camino. Y aprovecho para agradecer, recién pasado el ecuador de esta legislatura, a todo el equipo rectoral el esfuerzo brillante que se está haciendo en todos los ámbitos.
Nunca he ocultado mi preocupación por la amenaza que considero supone la nueva Ley Orgánica del Sistema Universitario. Aunque el discurso oficial sea que la ley promueve una “mayor autonomía universitaria”, la realidad del texto legal parece ir en dirección contraria, haciendo aún más compleja la gobernanza universitaria. Y el desarrollo y aprobación de decretos de desarrollo se ha visto ahora interrumpido por las dinámicas electorales. No obstante, seguiremos adelante tratando de evitar al máximo la perturbación en el buen funcionamiento de la Universidad. No puedo dejar de añadir las problemáticas no resueltas con la figura del profesorado asociado – en huelga a día de hoy – o el polémico Estatuto del Becario aunque su impacto en la UPV va a ser fundamentalmente en el incremento de gestión que introduce para casi 11.000 contratos.
Y vuelvo ahora la mirada, de nuevo, a nuestros nuevos doctores y doctoras, felicitándoles por haber alcanzado ese máximo grado académico que concede el sistema universitario. Habéis acreditado vuestra competencia para poder continuar una carrera investigadora, o para llevar esas capacidades al entorno empresarial, y promover desarrollos innovadores más competitivos, o quizás para emprender a partir de resultados de vuestra actividad de I+D+i. Sois alumni, doctores, de la UPV, una universidad fuertemente comprometida con la sociedad y con la empresa, y estoy seguro de que allí adonde vayáis llevareis detrás ese compromiso de la UPV. Y extiendo mi enhorabuena a vuestros directores y directoras de tesis, a quienes gestionan nuestros programas de doctorado, y por supuesto a la Escuela de Doctorado, a su directora y a todo su personal, y a la Vicerrectora de Investigación.
Y una especial felicitación a quienes habéis recibido los Premios Extraordinarios de Tesis Doctorales en la convocatoria 2023. Son sin duda el reconocimiento a la excelencia de un trabajo que ha destacado entre otras tesis doctorales sin duda también excelentes. Enhorabuena. Y enhorabuena al doctor Juan Enrique Vázquez Lozano por sus palabras en representación de los premiados.
Profesora Mariana Mazzucato, enhorabuena por su nombramiento como Doctora Honoris Causa, el más alto reconocimiento que otorga nuestra universidad, reservado únicamente a personas no sólo por sus destacados logros académicos, sino por sus relevantes contribuciones a la mejora de la vida civil, y por su reconocimiento como modelo a seguir para el conjunto de la sociedad.
La presentación de la Dra. Mazzucato, a cargo del profesor Álvarez-Coque y del profesor Peris, ha señalado la mayor parte de sus principales logros, de su gran trayectoria. Han hecho un enorme esfuerzo para resumir en pocos minutos las razones de su nombramiento como Dra. Honoris Causa, nombramiento que nuestro Consejo de Gobierno acordó otorgarle por unanimidad. Enhorabuena a la profesora Álvarez-Coque y al profesor Peris.
Profesora Mazzucato, su discurso de aceptación, que actúa como lección de clausura de este curso académico, ha sido cuando menos esclarecedor y motivador. Ha reflejado sus puntos de vista como uno de los mejores economistas del panorama mundial actual, así como su perspectiva de un mundo en continuo cambio.
Su trabajo ha guiado a muchos en el sector público a actuar más allá de "ser un facilitador o regulador" y convertirse en un "activo formador y creador de mercado". La historia lo demuestra, en industrias que hoy damos por sentadas como el sector espacial. Esas industrias, no hace tanto tiempo, sólo estaban siendo ideadas por unos pocos funcionarios públicos inteligentes capaces de ver todo su potencial. El sector público estaba ahí para hacerlo realidad, el único actor capaz de aportar la visión y los fondos necesarios para una inversión que tardaría décadas en retornar.Me gusta preguntarme: "¿qué hay de nosotros, como institución, en cada nuevo Doctor Honoris Causa que nombramos?". En su caso, debo decir que el vínculo es muy claro, ya que nuestro objetivo como universidad va más allá del papel tradicional que las instituciones de educación superior suelen asumir en España. Nuestra postura única se basa en la combinación de la ciencia, en su más alto nivel, con las artes, el diseño y la administración de empresas, y en establecer alianzas significativas con toda una serie de industrias. Eso es lo que da sentido a un esfuerzo colectivo de una comunidad académica que siempre ha sentido que su papel iba más allá de su propio tiempo. Luchamos por formar parte de un proceso de incepción de nuevas industrias, acelerando todo el proceso y teniendo una visión como institución para promover nuevos sectores emergentes, trabajando para atraer talento a nuestra comunidad, y siendo una razón para que algunas empresas de alta tecnología vengan a establecer nuevos laboratorios o fábricas en nuestras proximidades.
Y todo ello lo hacemos en estrecho contacto con otros agentes públicos, como el ayuntamiento. El profesor Richard Florida (e inspirador y a veces provocador teórico de los estudios urbanos) escribió que "para prosperar en la era creativa, las ciudades deben abrazar el talento, la tecnología y la tolerancia". Me gustaría expresar mi gratitud a nuestro anterior alcalde, Joan Ribó, por su papel a la hora de abrazar esta visión, de hacer posible el vínculo entre la ciudad y el mundo académico, y por la sabia decisión que tomó de contar con el profesor Mazzucato como parte de este proceso. Seguiremos abrazando esta visión, en las tres ciudades donde se encuentran nuestros tres campus, para llevarla a su máximo potencial.Querida Directora General de Universidades, te agradecemos tu presencia en este acto y tus palabras. Quiero aprovechar una vez más para reconocer y agradecer el esfuerzo que la Generalitat ha realizado en estos años para mejorar la calidad de nuestro sistema universitario, y también tu esfuerzo individual como Directora General. Muchas gracias, Pilar. Puede decirse sin duda que la Generalitat, desde distintos departamentos o consellerias, ha apoyado con decisión y acierto el desarrollo y mejora del sistema valenciano de ciencia, tecnología e innovación, y los logros son patentes. La Comunitat Valenciana es reconocida en este momento con índices de innovación superiores a la media europea. Y ha habido avances importantes en convocatorias y acciones de apoyo a la I+D+i, la innovación y el emprendimiento a las que desde luego nos hemos sumado desde la UPV. Se ha conseguido liquidar la llamada “deuda histórica”, implementar finalmente el convenio del personal laboral de las universidades públicas valencianas, y poner en marcha iniciativas tan importantes como VALGRAI. Me hubiera gustado poder decir lo mismo respecto a la puesta en marcha de un Plan Plurianual de Financiación, pero a eso no hemos llegado. Y la responsabilidad de no haberlo conseguido es compartida por las universidades. Hubo una propuesta, quizás tardía, de Plan por parte de la Generalitat, que a muy juicio era una buena base de partida, y que fue claramente pero no abiertamente rechazado desde algunas universidades. Un grave error muy nocivo para el sistema en su conjunto. Es imprescindible contar con un PPF, y es la mínima garantía, que debemos dar las propias universidades públicas a la sociedad, de que se nos financia con racionalidad y de acuerdo con lo que aportamos a esta. No hacerlo así, y asumir por nuestra parte que es suficiente una alternativa basada en incrementos y distribuciones del presupuesto público sin rendición de cuentas, es una grave equivocación que perjudica al sistema público universitario. La UPV seguirá trabajando en pro de un PPF responsable y transparente, porque somos una universidad pública y apostamos por servicios públicos de calidad … seguiremos apostando por una docencia de la máxima calidad incluso con recursos de orígenes distintos al público - como ya hacemos en parte gracias al mecenazgo-, y por la I+D+i de calidad, la cooperación con la empresa y en general con la sociedad.
Y ya para concluir reitero mi felicitación a nuestra nueva Doctora Honoris Causa, Dra. Mariana Mazzucato, a los premiados por sus excelentes tesis doctorales, y a todos los nuevos y nuevas doctores. Y Concluyo con una cita de nuestra nueva Doctora Honoris Causa en una entrevista, en la que dijo que “El futuro no es algo que simplemente sucede, es algo que creamos” y, añado, que esa es una visión compartida por nuestra comunidad universitaria.
Muchas gracias.